El pasado 24 de febrero, el dueño de una recicladora en Bastión Popular encontró un artefacto explosivo en su negocio. Él habría recibido amenazas por parte de los vacunadores, quienes le pedían $5.000.
Una mujer fue asesinada a tiros por un sujeto que llegó a su local a pedir ‘la cuota’ por seguridad. Ella se negó al pago. El hecho ocurrió en el sector Las Cañas, noroeste de Guayaquil.
Ellos son parte de las víctimas de los vacunadores. Según Luis Sánchez, presidente provincial de Artesanos, de cada 10 dueños de negocios, siete están siendo extorsionados.
De acuerdo a cifras de la Unidad Nacional de Investigación Antisecuestro y Extorsión (Unase), en 2021 existieron 2.700 casos, mientras que en 2022 fueron 7.473. Sin embargo, existen personas que no denuncian.
Héctor Franco, jefe nacional de la Unase, mencionó que las personas por temor no denuncian y eso impide que se activen acciones en los nuevos sectores que están siendo extorsionados.
Ante este panorama, la Policía inició su campaña “Di alto a la extorsión. No pagues, denuncia”, en la que se activó la línea 1800 delitos (335486), para que las personas denuncien de forma reservada y así puedan detener a los sujetos que atemorizan a los dueños de locales.
Según Franco, el problema parte desde que la gente paga el dinero que los ‘vacunadores’ piden y así se acostumbran a seguir exigiendo la cuota.
Esmeraldas, Guayas, Manabí, Pichincha, Los Ríos y Azuay son las provincias que reportan más casos de extorsión.